Los seres humanos tendemos a creer que por realizar una actividad todos los días, ya no es necesario tener comportamientos seguros.
Esta forma de pensar incrementó el índice de accidentalidad en las manos en los empleados de Cerrejón.
Solución
Se diseñó “EL MUSEO DE LAS MANOS”: un espacio donde se mostraban los accidentes más comunes por no acatar las normas de seguridad establecidas.